¡Bese ese sapo! - reseña crítica

En nuestras vidas siempre hay un sapo. O incluso varios. En vez de quejarnos, enojarnos y frustrarnos con él, debemos emplear otro método. Brian Tracy propone ver la vida desde una perspectiva positiva, besando ese sapo para poder alcanzar nuestras metas. De esta forma, gozar de autoestima y vivir plenamente parece posible.

1. Siete verdades sobre ti

El estado natural de los seres humanos es ser felices y tener entusiasmo por vivir. Según la visión de Brian Tracy, si estamos insatisfechos en algún área es porque “algo va mal en su manera de pensar, sentir o actuar”.

La clave es entender que ya somos privilegiados por lo que nos ha tocado.

Tienes que aceptar estas siete verdades acerca de ti mismo:

1. Eres una persona buena y excelente por completo; eres valiosa y mereces la pena más allá de toda medida.
2. Eres importante, de muchas, muchísimas maneras.
3. Tienes un potencial sin límites y la capacidad de crear tu vida y tu mundo según lo desees.
4. Creas tu propio mundo en todos los sentidos mediante la manera en que piensas y mediante la profundidad de tus convicciones.
5. Siempre eres libre de elegir el contenido de tus pensamientos y la dirección de tu vida.
6. Estás en esta tierra con un gran destino: se espera que hagas algo maravilloso con tu vida.
7. No hay límites sobre lo que puedes hacer, ser o tener, salvo los que le pongas tú mismo a tus propias ideas e imaginación.

2. Imagina a tu príncipe azul

El autor nos invita a preguntarnos cómo seríamos si fuéramos la mejor persona que pudiéramos ser.

En este proceso tenemos la alternativa de utilizar la “varita mágica” que propone Tracy. La idea es que imaginemos que tenemos una varita mágica para hacer que nuestra vida sea excelente en cuatro campos:

1. Ingresos y trabajo.
2. Familia y relaciones.
3. Salud y forma física.
4. Independencia económica.

“Una de las actitudes más importantes de las personas con éxito se llama ‘idealización’”, señala el autor.

Haciendo esto, construimos una visión ideal sobre nuestro futuro dentro de la cabeza.

Si combinamos la idealización con la varita mágica, practicamos un pensamiento sin límites que nos libra del estrés generado por el trabajo. Esto es un “sello distintivo de quienes están en lo más alto y consiguen los mejores resultados en todos los campos”.

3. Mira tu sapo a la cara

Para Tracy, “todos nosotros tenemos un sapo al que es necesario besar, a veces varios sapos”.

¿Qué o quiénes son los sapos? Pueden ser personas o situaciones pasadas negativas, inconvenientes actuales, dudas o creencias que nos limitan.

Si queremos salir de este lugar, lo que debemos hacer es enfrentarnos a esos sapos. Hay que correr el riesgo.

En esta senda, lo que no hay que resignar es nuestra propia felicidad ni nuestra paz mental esperando que alguien cambie. Seguramente esto nunca sucederá.

Por otro lado, para controlar una situación negativa tenemos que analizarla detalladamente. Puedes hacer esto mediante cuatro preguntas:

• ¿Qué pasó exactamente?
• ¿Cómo sucedió?
• ¿Qué se puede hacer?
• ¿Qué medidas tomaremos ahora?

En este sentido, tenemos que tratar de comprender qué está sucediendo antes de arribar a una conclusión final.

También aparecen inquietudes que ocasionan estrés y ansiedad. Estas se pueden eliminar con el “rompepreocupaciones”:

• Define la situación que te preocupa con la mayor claridad posible.
• Determina el peor resultado posible de esta situación.
• Decide aceptar lo peor, si llegara a ocurrir.
• Empieza de inmediato a mejorar lo peor.

4. Limpia el estanque de esos feos sapos

La meta de cada ser humano es ser feliz. Afortunadamente, ahora es más posible serlo que antes, porque conocemos mucho más acerca de la felicidad y la satisfacción.

Diversos estudios han arrojado como resultado que el principal obstáculo para alcanzar estos estados son las emociones negativas.

Pero de esas experiencias nocivas podemos intentar hallar una lección que valga la pena. Así transformaremos lo negativo en positivo.

Lo que ayuda a convertirnos en la mejor persona que podemos ser es tener el control de nuestra propia vida. La propia Ley del Control dice esto, afirmando que nos sentimos felices cuando llevamos la vida que nosotros queremos.

Entonces, según Tracy, “nuestro centro de atención único debe ser, pues, la eliminación de emociones negativas de todo tipo”.

5. Draga la ciénaga

Si bien deseamos librarnos de las emociones que nos limitan y no nos dejan avanzar, muchas veces las tenemos arraigadas a nuestra mente.

¿Cuáles son las raíces de las emociones negativas? Hay cinco factores que estimulan su aparición y el apego hacia ellas:

• Justificación: con ella defendemos nuestra negatividad y nuestro derecho a enojarnos.
• Identificación: nos tomamos las cosas de manera personal.
• Hipersensibilidad: se da ante las ideas, opiniones y actitudes que tienen otros ante nosotros.
• Juicios negativos: la propensión a hacer valoraciones negativas hacia los demás.
• Racionalización: cuando damos una explicación socialmente aceptable a un acto que es socialmente inaceptable.

¿Y qué podemos hacer para eliminar las actitudes críticas de nuestra cabeza? A continuación, el autor menciona una serie de posibilidades:

• Permanecer serenos e indiferentes, sin juzgar ni condenar.
• Sentir empatía por los demás.
• Utilizar el Método Sedona para volver a tener el control emocional de nuestra vida.
• Soltar lastre, deshacerse de un suceso negativo abriendo el corazón.
• Practicar la compasión hacia los demás.

6. Cambia el agua de tu estanque

A muchas personas les cuesta admitir nuevas ideas, tornándose así en negativas y con poca motivación.

Si bien no es sencillo, tenemos que hacer un esfuerzo para dejar atrás las ideas viejas.

Existen tres formas diferentes de crear nuevos hábitos de pensamiento, con una mirada más optimista y de autoconfianza:

1. El poder de las afirmaciones positivas: nos convertimos no solo en lo que pensamos, sino también en lo que nos decimos a nosotros mismos. Para ello tenemos que hacer afirmaciones que cumplan con las tres P:
   • Personal
   • Presente
   • Positiva
2. Creemos lo que vemos: esta técnica es la visualización; si imaginamos y vemos lo que queremos a futuro, esas órdenes penetrarán en nuestro subconsciente. Si queremos cambiar nuestra forma de pensar debemos prestarle atención a estas cuatro claves:
   • Nitidez
   • Intensidad
   • Duración
   • Frecuencia
3. Prepárate antes del acontecimiento: si te anticipas a un hecho o evento importante y estresante, estarás mental y emocionalmente preparado para poder resolverlo de forma nítida.

7. Busca la belleza en los sapos

“No es lo que nos pasa en la vida lo que determina cómo nos sentimos; es cómo reaccionamos ante lo que pasa”, asegura el autor. “No son los sapos que hay en nuestra vida, sino la manera en que nos enfrentamos a ellos”.

La forma más rápida de transformar algo negativo en positivo es decidirnos a ver nuestro pasado de otro modo. Aplicando la Ley de Sustitución, sustituye un pensamiento negativo por uno positivo. Tus emociones cambiarán prácticamente al instante.

De todos modos, ten en cuenta que los problemas son inherentes a los seres humanos. Por más que luchemos por intentar evitarlos, aparecerán.

Si tienes una vida activa, probablemente te llegue una crisis cada tres meses. Una crisis que puede ser personal, física, económica o familiar.

En estos casos, debes “mantener la calma, buscar lo bueno, la lección valiosa, y luego actuar para reducir o minimizarla”.

8. Da un salto adelante con confianza

Los niños llegan al mundo siendo optimistas, curiosos y sin miedo ni inhibiciones.

Pero por culpa de los padres, pronto empiezan a padecer la crítica destructiva y la falta de amor. Esas dos actitudes son el origen principal “de la infelicidad y la disfunción en la edad adulta”, explica Tracy.

Si se combinan, el niño se vuelve vulnerable, tanto física como emocionalmente.

Cuando ya son adultos, el miedo al fracaso se traduce en miedo a la pérdida. Mientras tanto, el miedo al rechazo aparece como miedo a las críticas.

Estas son actitudes defensivas, justamente las que no tiene una persona “plenamente funcional”. Esto último se refiere a alguien que goza de un alto nivel de autoestima y está seguro de sí mismo.

Para el autor, ser plenamente funcional debería ser el objetivo de todos.

9. Dile adiós a tus feos sapos con un beso

La culpa y la falta de valor son dos sentimientos que atentan contra nuestra idea de llegar a ser la mejor versión de nosotros mismos.

Si no ponemos atención y los eliminamos, sabotearán nuestros sueños.

Puedes seguir estos cuatro pasos que propone Tracy para liberarte de la culpa:

1. Desde este momento, no te critiques nunca por nada: si sinceramente no quieres que algo sea verdad, no te lo digas.
2. Niégate a criticar a nadie por nada: elimina de una vez todas las críticas destructivas de tu vocabulario.
3. Niégate a utilizar la culpa contra otras personas: ya no utilices más la culpa en tu vocabulario, en tu familia y en tus amistades.
4. Niégate a que te manipulen mediante la culpa: rechaza cualquier intento de hacer que te sientas culpable por el motivo que sea.

10. Espera lo mejor de tu sapo

Si continuamos siendo infelices, es porque estamos muy enojados contra alguien que nos hizo o no nos hizo algo en el pasado. No podemos perdonar a esa persona.

Para evitar ser decepcionados, lo que tenemos que hacer es no dar por hecho que las situaciones serán tal cual como deseamos.

“La norma es tener claro lo que queremos, pero ser flexibles respecto al proceso para conseguirlo”, aclara el autor.

En ese camino pueden aparecer errores. Son normales, todos los cometemos.

Tracy dice que “la realidad es que los seres humanos somos imperfectos. Todos los individuos y todas las organizaciones formadas por individuos son imperfectos”.

11. Deja de aferrarte a esos dolorosos sapos

Más de la mitad de los problemas que tenemos a lo largo de nuestra vida están relacionados con otras personas. Pero no es bueno seguir atados a ellos.

Si de verdad queremos encontrar la felicidad, debemos ser capaces de perdonar a estos cuatro grupos de personas:

• Nuestros padres: les sucede a muchos adultos que aún siguen enfadados con sus padres por algo que hicieron o no hicieron durante la infancia. Pregúntate cuánto tiempo realmente quieres estar enojado por algo pasado, y perdónalos. Hicieron lo mejor que supieron.
• Relaciones íntimas: esto incluye a todas las que has tenido antes. Si no las perdonamos, seremos muy vulnerables ante otras personas.
• Todos los demás: aquí entran hermanos, amigos, antiguos empleadores y socios, entre otros, que nos hayan hecho algún mal en el pasado. Hay que perdonarlos en nuestro corazón, no hace falta decírselo en la cara.
• A ti mismo: el último paso para dejarnos ser libres es perdonarnos a nosotros mismos. Esto solo es posible si antes tuvimos el valor y el carácter para perdonar a todas las personas de nuestro pasado.

12. Siete claves para conseguir una personalidad positiva

Según el autor, “la buena forma mental es como la buena forma física. Con el entrenamiento y la práctica se desarrollan altos niveles de autoestima y una actitud mental positiva”.

Tracy señala que estas son las siete claves para ser una persona completamente positiva:

1. Háblate de modo positivo, controlando tu diálogo interior.
2. Visualización positiva, tratando de ver tus metas como si ya las hubieras alcanzado.
3. Asóciate y relaciónate con otras personas positivas.
4. Aliméntate mentalmente de forma positiva con libros y artículos que eduquen y motiven.
5. Fórmate y desarróllate positivamente, buscando mejorar permanentemente.
6. Ten hábitos de salud positivos, como llevar una dieta equilibrada o hacer ejercicio de forma regular.
7. Ten expectativas positivas, esperando siempre el éxito.

Notas finales

Pensar de forma negativa y vivir con resentimiento no es para nada saludable. Brian Tracy nos deja bien en claro esto en “¡Bese ese sapo!: 12 formas de convertir lo negativo en positivo”.

Para empezar, nos levanta el autoestima recordándonos que somos valiosos como seres humanos.

Luego nos invita a imaginarnos cómo seríamos si fuéramos la mejor persona que podríamos ser. Ese debe ser nuestro objetivo, aspirar a ser una persona que está segura de sí misma y disfruta de su vida en todos los ámbitos.

Todo esto, mientras nos da alternativas a los problemas que pueden ir apareciendo en el proceso.

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